Navegando entre la medianía y la mediocridad, el Guadalajara está por sumar otro fracaso en Liga MX, tras una desastrosa temporada en el Torneo Clausura 2025.
Las Chivas no han podido armar un equipo sólido y competitivo que les permita alcanzar los primeros lugares de la tabla general de posiciones y buscar el título de Liga, que no consiguen desde hace 8 años cuando obtuvieron el campeonato en el Torneo Clausura 2017.
El fracaso ha sido el común denominador desde que Jorge Vergara tomó las riendas del popular equipo tapatío, en octubre de 2002, hace 22 años y medio. Las frías estadísticas son contundentes: en 44 torneos, solamente ganó dos campeonatos de Liga -Apertura 2006 y Clausura 2017- y sólo dos veces fue líder general de la competencia -Clausura 2008 y Apertura 2011-; en 21 torneos cortos no clasificó a Liguilla, es decir, casi en la mitad no pudo avanzar a las finales. En este lapso, 30 diferentes entrenadores y 15 directores deportivos pasaron por la institución rojiblanca.
Cuando Jorge Vergara Madrigal se adjudicó la propiedad del Guadalajara prometió títulos, protagonismo del equipo y que reviviría al “Campeonísimo”, con triunfos, en alusión a la época dorada de las Chivas, finales de la década de los años 50 y principios de los 60. Los resultados deportivos no corresponden a lo que ofreció el empresario jalisciense.
Tras el fallecimiento de Vergara Madrigal, su hijo Amaury Vergara Zatarain asumió la presidencia del equipo, en junio de 2019. Los resultados deportivos no mejoraron, lo más relevante fue llegar a la final en el torneo Clausura 2023 -como tercer lugar de la tabla general- que perdió ante Tigres.
Con Amaury al frente, se han añadido más fracasos y decepciones, acompañados de proyectos deportivos fallidos y constantes cambios en la dirección técnica y directiva. En casi 6 años, pasaron 10 entrenadores: Luis Fernando Tena, Víctor Manuel Vucetich, Marcelo Michel Leaño, Ricardo Cadena, Veljko Paunovic, Fernando Gago, Arturo Ortega, el español Óscar García y Gerardo Espinoza. Ha gastado millones de dólares sin éxito y ha sumado desilusiones, lo que convierten al actual Guadalajara en las peores Chivas de la historia.